En los próximos días, toda la atención del mundo fiscal y financiero de México se centrará en un solo evento: la presentación del Paquete Económico 2026 por parte de la Secretaría de Hacienda al Congreso. Pero, ¿qué es exactamente este paquete? No es un solo documento, sino un conjunto de propuestas que definen el rumbo económico y fiscal del país para el siguiente año.
El primer componente son los Criterios Generales de Política Económica (CGPE). Este es el marco macroeconómico. Aquí, el gobierno plasma sus pronósticos de crecimiento del PIB, inflación, tipo de cambio y precio del petróleo. Estas estimaciones son la base sobre la que se construye todo el presupuesto.
El segundo documento es la Ley de Ingresos de la Federación (LIF). Como su nombre lo indica, es el documento que estima cuánto dinero espera recaudar el gobierno y de dónde provendrá. Detalla los montos esperados por la recaudación de cada impuesto (ISR, IVA, IEPS), así como ingresos no tributarios como los petroleros.
En tercer lugar, está el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF). Esta es la otra cara de la moneda: el plan detallado de cómo se gastará el dinero recaudado. Asigna los recursos a cada secretaría, a los estados, a los programas sociales y a los grandes proyectos de infraestructura.
Finalmente, y de máximo interés para nosotros, viene la Miscelánea Fiscal. Este es el conjunto de propuestas de reforma a las leyes fiscales (Ley del ISR, Ley del IVA, Código Fiscal de la Federación, etc.). Aquí es donde se definen las nuevas reglas, tasas, deducciones y obligaciones que impactarán directamente a empresas y contribuyentes.